[ # ] Alphonse de Liechtenstein

Traté de mantener mi calma y de disfrutar este sitio, ya conocía a varias personas porque después de todo casi todos eran de la realeza pero casi nadie estudiaría la misma carrera que yo, necesitaba a Georgina para descargarme, ella sabría como lograr que superara todo esto pero no era sencillo, ella siempre se perdía y jamás contestaba el celular, a veces deseaba quedarme alejada de todo y estar sólo en casa con mi padre, montábamos a caballo, comíamos sólo nosotros dos y disfrutábamos un montón sin necesidad de obligación o castigos pero debía de afrontar la realidad y de que no quería depender de mi título para mantenerme toda mi vida.

Pronto renunciaría al título de princesa de Bélgica, no pertenecía allí y de hecho jamás había vivido en ese lugar ni lo sentía mi hogar, no podía gobernar o fingir que representaba un sitio que no era mío. Amy se pondría histérica cuando le dijera pero ella no tenía derecho sobre mí, podía ser mi madre y todo pero no había ejercido las funciones de una jamás porque tú no quisiste me recordé pero no podía perdonarla, no después de cómo abandonó a mi padre y planeaba dejarlo incluso sin mí, esperaría unos meses más porque sabía que ahorita no lo tomarían en cuenta para que ya después lo hiciera tal y cómo debía ser.

Para liberar toda la tensión había decidido ir a jugar un poco de Béisbol, me encantaba practicarlo en casa, eso me relajaría un poco y ya después si buscaría a Alphonse, llevábamos tiempo en nuestra relación y sólo estábamos juntos para no estar solos pero tenía por seguro que no lo quería como esposo ni nada más serio de lo que ya teníamos ahora porque sencillamente no era el chico que quería para mi, un día me tocaría dejarlo o el me dejaría a mí y eso sería otro problema con mi madre porque según ella me quedaría soltera de por vida ¿Cómo era posible que me quería controlar en cada aspecto? yo no era Maddie, ni los gemelos ni ningún niño a quien podía decirles que hacer sin rechistar.

Prefería estudiar en Inglaterra, con mis amigas pero era obvio que mi madre no lo permitiría y me estaba cansando de siempre pelear con ella por lo que me arreglé para ir a la famosa fogata no sin antes prometerme a mí misma que lo disfrutaría al máximo, si mi madre me quería aquí tamibén le llevaría problemas. Me encontré con un par de chicas que había conocido en las canchas de beisbol en la tarde y sin darme cuenta empecé a beber, inicié con un vodka suave mientras conversaba ¿Donde estaba Alphonse? en estos momentos era cuando más lo necesitaba a mi lado como apoyo y para conocer a sus amigos, vah, Debía de andar en alguna parte. Empezamos a jugar a shots disimulados, con algo de refresco cuando recibí un mensaje de mi madre pidiendome que cuidara de mis hermanos ¿Esos mocosos no se podían cuidar solos? ¡Ja! yo no era niñera de nadie y menos cuando estaba en algún sitio obligada, quería que estaba fuese mi bienvenida y una de las grandes.

Llenamos los vasos de todas hasta el tope y me retaron a beberlos todos, en Inglaterra esto era sólo un inicio así que dando un respiro entre cada uno los bebí todos empezando a sentirme algo mareada pero todo quedó en el pasado cuando sonó mi canción favorita y las chicas me tomaron para subirnos a la barra, cerré los ojos mientras seguía bailando, escuchaba los gritos de todos a nuestro al rededor pero no importaba, quería olvidarme de mi madre, de la realeza, de la universidad, de Alphonse y enfocarme en mí por unos minutos. Cada vez más ruido se formaba a nuestro alrededor y reí mirando a la chica de al lado cuando el alcohol empezó a hacer efecto, me detuve un minuto pero ya luego todo volvió a su lugar.

La canción se acabó y empezó otra aún mejor pero al bajar la vista estaba Alphonse gritándome todo enojado ¿Qué le ocurría? Este chico no podía reclamarme nada, sólo estaba bailando ... para todos, pensaba reclamarle cuando me bajó de la barra y me alejó de aquello ¿Me estaba celando? ¿Quién le daba el derecho? - ¡Bájame Al! - me removí en sus brazos intentando zafarme, sabía que si lo seguía haciendo terminaría vomitando y mejor hacerlo en mi cabaña - ¿Qué te ocurre? ¿Es que ahora eres mi padre? - le dije enojada cuando estaba en el suelo, mis manos estaban en mi cadera y lo veía alzando amabas cejas - sólo estaba disfrutando del momento y llegas tú y te la haces de héroe y ... - ¡Agh! era mi novio a ojos de todos y lo quería pero cuando alguno quería hacer algo, el otro se mantenía al margen ¿no? Sentía cómo el liquido avanzando por mi garganta y corrí a unos arbustos, por lo menos podría hacerlo sin toda esa multitud observándome, cuando terminé me volví con Alphonse y lo miré expectante - ¿Estabas celoso? - lo miré mientras una sonrisa se formaba en mis labios, llevábamos tiempo saliendo y algo debía de generarle aunque eso si que no me lo esperaba, Alphie celandome ¿a mí? Estás siendo ridícula Emma, son una pareja si él lo hiciera tú le harías lo mismo me recordé pero incluso pensar me dolía en estos momentos.

No me gustaba parecer la mala de la relación, quería a Alphonse y le tenía mucho aprecio pero ambos sabíamos que andábamos por nuestro lado y estas vacaciones habían puesto en duda todo esto en duda ¿Comprometerme? ¿Era en serio? por dios, tenía 19 años y apenas empezaba la universidad, no era mi plan quedarme en casa y ser la esposa perfecta para un hombre que por más perfecto que fuese ante la prensa tenía muchos defectos para mí y el hecho de que fuese a una joyería no implicaba nada, él me regalaba joyas por cualquier fecha importante y a su familia, la verdad era que esto de tener una relación pública era una pérdida de tiempo. Aparte no podría casarme por obligación, si llegaba a tener un hijo con Alphie y después nos separábamos le haría sufrir a ese niño lo mismo que sufrí yo y sinceramente no era tan cruel como Amy, no soportaría estar atada a una persona por obligación pero no planeaba darle un ambiente donde mi hijo sólo viviera con uno de sus progenitores.

Cuando me dejó en el suelo me alejé corriendo para vomitar, no había bebido tanto pero si lo suficiente para tener una noche en vela, me sorprendió ver que a pesar de todo lo que le había dicho Alphie sostuvo mi cabello y me reconfortó para ya luego limpiarme y volverme hacia él intentando darme de la dura pero la verdad era que en mi interior le agradecía por no dejarme hacer el ridículo la primera noche en la universidad, no quería ser el motivo de burlas pues ya me bastaba con ser la nueva del lugar. Me dolía excesivamente la cabeza, pero me seguía esforzando por mantenerme lúcida durante mi conversación con él pues aunque él fuese una especie de desahogo al saber mi situación familiar sabía que no me estaba comportando acorde a lo que debía de hacer, ignorar a mi madre y ver esto como un beneficio para mí.

Lo miré seriamente, me daba gracias como trataba de controlarse, sí que era un tierno intentando de no decirme lo muy cobarde que había sido esta noche pero a pesar de todo, no sentía ninguna atadura de sentirme mal por coquetear con otros o al menos dejar me miraran mientras pasaba mi mala noche - Alphie el hecho de que los llames idiotas ya lo hace obvio que estabas celoso - le expliqué cruzándome de brazos para encontrar de nuevo mi equilibrio ¿mi cabaña? ¿Tan temprano? planeaba tomarme algo y volver a salir, respirar del aire fresco y charlar con más personas pero era obvio que no estaba en el mejor aspecto para conocer a sus amigos ¿no? - pero ya no importa, creo que también me sobrepase un poco - fruncí el ceño admitiéndolo y empezando a caminar en dirección contraria a la fogata apoyándome de él - ¿me dejaras y volverás o te quedarás un rato? - le pregunté mirándolo a los ojos y sonriendole, debía de estar enojado conmigo y detestaba que estuviésemos así porque aunque fuese mi pareja yo lo veía más como una clase de mejor amigo ... con derechos - digo, comprenderé si tienes cosas pendientes que hacer, después de todo no tendrías que andar de niñera conmigo - lo excusé rápidamente, no quería que se sintiera atado a estar en mi cabaña sólo porque aún no tenía amigas y estaba en un estado deplorable, porque él si tenía experiencia en esta escuela y durante todas las vacaciones jamás vio a ninguno de sus amigos y amigas.